QUIENES SOMOS

Desde el 23 de abril de 2001, un numeroso grupo de militantes de distintas extracciones políticas, sociales y gremiales; decidimos dar un impulso colectivo a las iniciativas por la recuperación del patrimonio energético de nuestro país. Desde ese momento el MORENO se ha convertido en una referencia obligada a la hora de discutir una política soberana en materia energética en la Argentina; e ineludible antecedente para posicionarse en defensa del patrimonio nacional.

miércoles, 3 de marzo de 2010

MOVIMIENTO POR LA RECUPERACION DE LA ENERGIA NACIONAL ORIENTADORA Boletín No. 290 - 3 de marzo de 2010

DEFENDER LAS MALVINAS, NO ES POSIBLE SI NO SE HACE LO PROPIO EN EL CONTINENTE ARGENTINO


por José Rigane


No se puede defender y ser soberano por partes, como no se puede ser progresista en la política internacional, si no se es consecuentemente progresista en la implementación de las políticas nacionales.

LAS REGALÍAS HIDROCARBURÍFERAS EN LA DESIGUALDAD FISCAL PROVINCIAL



por Diego Mansilla y Martín Burgos Zeballos

El reparto de la renta petrolera entre el Gobierno Nacional, las provincias petroleras y las empresas impacta sobre la estructura económica en la que se asientan las relaciones políticas entre esos actores. Los autores evalúan el peso de las regalías hidrocarburíferas en las finanzas de las provincias petroleras, y el efecto que sobre ellas producen las retenciones impuestas por el Gobierno Nacional a las exportaciones.



FUCHAD QUIERE QUE SE LLEVEN LA SAL


por Diario “La Arena”

La Fundación Chadileuvú (FUCHAD) no acepta que la explotación de Potasio Río Colorado deje los residuos de sal común en las proximidades del río. Su presidente Héctor Gómez, señala además al diario pampeano que "...el potasio también es parte del patrimonio nacional", y reclama que la industrialización del mineral se realice en nuestro país.

NOTICIAS
Inundación y cortes - Cae demanda eléctrica - Menos regalías para Neuquén - Deuda con generadoras - Biocombustibles.

La información y los contenidos de las notas son responsabilidad de los autores.

INFOMORENO

Editor Responsable: Fernando "Pino" Solanas

Director: Hugo Palamidessi

Consejo de Redacción: Fernando Solanas, Gustavo Calleja, Félix Herrero, José Rigane

Colaboradores permanentes: Héctor Gómez, Isaac Gurovich, Natalio Kuschnir, Diego Mansilla, Gabriel Martínez


Solicite su suscripción gratuita del InfoMORENO a info_moreno@yahoo.com
Vea los números anteriores del InfoMORENO en http://www.info-moreno.com.ar

DEFENDER LAS MALVINAS, NO ES POSIBLE SI NO SE HACE LO PROPIO EN EL CONTINENTE ARGENTINO


por José Rigane


No se puede defender y ser soberano por partes, como no se puede ser progresista en la política internacional, si no se es consecuentemente progresista en la implementación de las políticas nacionales.

EL MODELO NEOLIBERAL Y LA PÉRDIDA DE SOBERANÍA NACIONAL

Que los británicos, sus gobiernos y empresas multinacionales son “piratas del mundo” no es un descubrimiento del Siglo XXI.

Que los gobiernos del primer mundo, que representan del 20 al 25% de la población total del planeta, consumen el 80% de la energía que se produce en el mismo, no es novedad.

Que muchos de ellos, como EEUU e Inglaterra, son capaces de invadir, desatar guerras, matar, desestabilizar gobiernos, en procura de obtener los recursos energéticos que no tienen, con tal de preservar su modelo de vida, basado en el consumismo y en la súper explotación de sus dominios, tampoco es una novedad.

Así como no puede sorprender a nadie que haya petróleo en las Islas Malvinas, en el Mar Austral de Argentina, y en otros lugares del Continente Americano, tampoco puede ser una sorpresa el anuncio, con bombos y platillos, que el Reino Unido, en este caso con la Plataforma Ocean Guardian, de la compañía británica Desire Petroleum, y demás instrumentos de la guerra económica, viene a explorar, perforar, extraer y quedarse con el petróleo argentino. Estamos ante un nuevo atropello, estamos otra vez ante el desarrollo de una iniciativa política del primer mundo, dispuesto a avasallar nuestros derechos, intereses y recursos energéticos nacionales.

La noticia, reflejada en varios medios nacionales, respecto a que un barco de origen danés, habría sido detenido para impedir que lleve insumos petroleros (1) a Malvinas, me trae a la memoria aquel episodio, protagonizado por el entonces Coronel Enrique Mosconi, cuando una subsidiaria de la empresa Standard Oil (2), en 1922, le negaba combustible, si previamente el Estado Nacional no pagaba al contado el valor del mismo. En ese momento comprendió las dificultades que se le presentarían al país si no contaba con una política soberana en materia de recursos energéticos. Hecho que decidió definitivamente al general patriota nacionalizar el petróleo y crear definitivamente YPF, para poder ejercer con autonomía las políticas soberanas de la nación en el campo energético. Otros ´patriotas´decidieron después, todo lo contrario.

Hoy, después de más de 30 años de implementación de las políticas liberales y neoliberales en nuestro país, con el agravante de su profundización exponencial en la ´década del menemato ´en el marco de la globalización y la privatización del patrimonio nacional que trajo consecuencias drásticas y perversas, como la extranjerización de nuestros recursos naturales, energéticos, de comunicación y de transporte entre otros, podemos verificar una acentuada pérdida de nuestra soberanía nacional.

LA EXTRANJERIZACIÓN SE CONFIRMA MEDIANTE DIVERSAS FUENTES

El periodista Maximiliano Montenegro, en un artículo publicado el 14-02-2010, en el Diario Crítica de La Argentina, titulado “SE LA LLEVARON EN CONTAINERS” dice:
“Entre enero y septiembre de 2009, los giros de dividendos al exterior ascendieron a u$s 4.934 millones, 6,7% más respecto del mismo período del año pasado, y 32,4% más comparado con igual lapso de 2007, cuando todavía gobernaba Néstor Kirchner y la economía crecía a tasas chinas.”
“Para que no queden dudas. El año de la recesión y la crisis financiera internacional, 2009, será el año de mayores transferencias de utilidades y dividendos de las ´multis´ a sus países de origen en las últimas décadas.”

Claudio Lozano, Diputado Nacional, integrante de la CTA, en un extenso trabajo, junto a otros especialistas del Instituto de Estudios y Formación, afirma:
“También se puede notar cada vez mayor extranjerización en la cúpula empresaria, (las 200 empresas que mas facturan); en 1997 esa facturación representaba el 31,6% del producto bruto corriente (PBI), en el 2005 alcanzó a representar el 53,1% del mismo y en el 2007 el 56,1 de dicho agregado, esto refleja un avance en la concentración de la economía en la Argentina.”
“Si en 1997 las firmas extranjeras representaban el 64,3% de las ventas de la cúpula, en el 2005 representan el 75,8% y en el 2007 alcanzan el 77,3% de la misma.”
“EN ARGENTINA SE MANTIENE LA MATRIZ ECONOMICA E INSTITUCIONAL NEOLIBERAL…” “Mientras tanto, en Argentina de las 500 empresas más importantes, dos tercios son extranjeras. Controlan el 69 por ciento de la producción, el 70 por ciento de las exportaciones y el 84 por ciento de las ganancias. De las 30 empresas líderes, sólo 5, son nativas. En la cúpula patronal del bloque dominante, el 82 por ciento, está integrada por firmas extranjeras o empresas argentinas multinacionales. Todas las Estructuras operativas y administrativas del Estado Nacional fueron diseñadas en los años ´90, y hoy perduran.”
“. .. este último gobierno no ha desterrado la oligopolización de los Mercados, siguen beneficiándose las grandes empresas exportadoras multinacionales (Cargill, Dreyfus, Bunge, Nidera, etc.).”
“…En una palabra continuamos con UN ESTADO ENDEUDADO, DEPENDIENTE DE LAS DIVISAS DEL INTERCAMBIO COMERCIAL EXTERNO, EMPRESAS EXPORTADORAS FORTALECIDAS. UN MERCADO EXTERNO EJERCIENDO SUPREMACÍA SOBRE EL INTERNO. “

LA PELEA POR LA SOBERANÍA ENERGÉTICA

En ese contexto, organizaciones, como el MORENO, la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA), y tantas otras, de defensa del consumidor, sociales, territoriales y en particular los integrantes de la Federación de Trabajadores de la Energía de la República Argentina (FeTERA), hemos venido denunciando que la crisis energética de nuestro país (que no solo es comprobable con el apagón generalizado) se debe fundamentalmente a un modelo energético basado en la privatización y extranjerización del mismo; que la solución solo es posible si se cambia el modelo, y el Estado deja de ser el socio “Bobo” de las multinacionales.

Hemos dicho y propuesto que la solución pasa por la recuperación del patrimonio a manos del pueblo argentino y del Estado Nacional, con el desarrollo de empresas estatales y controladas socialmente. Ahora, el Gobierno argentino, que en más de una oportunidad se ha autodenominado, popular y nacional, nada ha realizado en esta dirección. Primero, porque ha ratificado muchas de las políticas de la década del 90, en particular en el plano energético; segundo, porque hizo aprobar, mediante su mayoría automática en el Congreso Nacional en el año 2006, la Ley Corta y la Ley Larga, que beneficiaron a las empresas petroleras, al crear las condiciones para que las provincias licitaran directamente nuevas áreas y premiaron con subsidios y eximición de impuestos a todas las multinacionales, que exportan riqueza argentina por mas de 20 mil millones de dólares por año, sin control estatal y a simple declaración jurada.

Todo esto, en la esperanza de que las petroleras exploraran y constituyeran nuevas reservas que compensaran el consumo y la exportación, cosa que nunca hicieron, y ´así se robaron´ las reservas de 30 años de gas y 18 años de petróleo, descubiertas por las empresas del Estado, que eran propiedad del pueblo argentino, y pasaron a manos de grupos multinacionales, dejando al país obligado hoy a la importación de recursos energéticos.

El 18 de diciembre del 2006, Martín Rodríguez Rocha, en “4 Semanas”, afirmaba:
“La Cámara de Diputados de la Nación finalmente sancionó la llamada "Ley Corta", modificando la Ley de Hidrocarburos para que el Estado se retire finalmente de las tareas de control dejando a las provincias solas frente a las petroleras. Qué peor homenaje podía hacerle Kirchner, el Congreso de la Nación y los gobernadores de las provincias petroleras al día del Descubrimiento del Petróleo Nacional, que la modificación de la Ley de Hidrocarburos para permitir la provincialización de esos recursos, una medida menemista buscada por años por las petroleras bajo el disfraz del falso federalismo.”

LA PROFUNDIZACIÓN DE LA ENTREGA

Si tomamos en cuenta lo denunciado por Mario Cafiero y Javier Llorens el 8 de febrero pasado, cuando aseguran "que este último año se ha agravado el retroceso diplomático, político y económico de la Argentina en Malvinas y Atlántico Sur (3), al no desarrollar una clara política soberana de defensa de nuestros intereses en el Atlántico Sur, y al mismo tiempo alentar acuerdos económicos con la Unión Europea, mientras ésta “incorporó como territorio de ultramar europeo a las islas Malvinas, Islas del Atlántico Sur y Territorio Antártico Británico”.

Si consideramos además, la otra denuncia realizada por Cafiero y Llorens, “…contra el Ministro de Economía Boudou por haber designado al Banco inglés Barclays como coordinador del canje de deuda externa, cuando a su vez la Barclays es el principal accionista de la empresa Desire Petroleum, petrolera inglesa que está empezando este mes a explotar el petróleo de nuestras Malvinas.”

Y si seguimos con atención las afirmaciones de Félix Herrero, publicadas en el Diario Crítica de la Argentina, con el título “¿Qué debe hacer el Gobierno argentino?”(4), donde afirma, en referencia a la situación planteada en Malvinas que se debe aplicar la legislación vigente que dice que cualquier empresa que trabaje con permisos no otorgados por la Argentina no puede tener, al mismo tiempo, autorizaciones en el territorio y Mar Argentino, y continúa “…el Gobierno Argentino debe elaborar y dar a conocer al pueblo la lista de empresas, británicas o de otros países, que estén vinculadas con las empresas petroleras o de servicios hidrocarburíferos que hayan recibido autorización kelper o de Londres para trabajar en el mar de nuestras Islas Malvinas, haciendo así posible la retroversión de los permisos que tengan en nuestro territorio.”

Y tomando en cuenta que el potencial petrolero de esta zona del territorio argentino se estima entre unos 180.000 y 200.000 millones de barriles, podemos afirmar que, en un mundo donde la energía y los recursos naturales ganan cada vez más valor geopolítico, las empresas y el gobierno inglés actúan con suma prepotencia por sobre los derechos argentinos, trayendo reminiscencias de los años del imperio petrolero de las “Siete Hermanas”(5), en los que el mundo fue dividido entre las grandes petroleras para que explotaran sus recursos a su antojo, sin que nada quede en las colonias políticas y/o económicas.

Sin ir más lejos, Pan American Energy, que es subsidiaria de la Amoco y British Petroleum (BP), nacida en 1908 como Anglo Persian Oil Company, para ejecutar el saqueo inglés de Irán, es una de esas siete hermanas, y fue beneficiada por el gobierno de Néstor Kirchner, que le extendió, hasta su agotamiento, la concesión de Cerro Dragón, el área petrolera más rica de nuestro país, 10 años antes de que venciera el actual contrato de concesión.

Este atropello de la soberanía argentina sobre su territorio debe ser rechazado de la forma más enérgica. El Estado Nacional debe profundizar sus reclamos, debe actuar soberanamente, ante un acto ilegal que continua el saqueo de la riqueza natural no renovable de todos los argentinos. En este sentido, es necesario denunciar públicamente a las empresas y particulares argentinos que lucran con contratos espurios, destinados a perfeccionar el saqueo, como el caso de Techint, cuyo embarque de tubos sin costura fue detenido exitosamente cuando se dirigía a las Islas Malvinas.

La Resolución 407/07 de la Secretaría de Energía prohíbe expresamente que operen en nuestro país empresas que “hayan desarrollado actividades hidrocarburíferas en la Plataforma Continental Argentina, sin haber obtenido habilitaciones (...) por autoridad competente Argentina” y hasta “prestar apoyo comercial, logístico o técnico”. Por tanto, la petrolera Tecpetrol del Grupo Techint deberá ser inhabilitada para operar en nuestro país, reintegrando las concesiones con que cuenta. La propia Resolución aclara que esta prohibición es tanto para las petroleras como para “sus empresas controlantes, controladas, accionistas, y asociadas”. Asimismo, se deberá realizar un control efectivo de cuales empresas lucran con esta violación de la soberanía nacional y proceder a su inhabilitación, como indica la ley.

Los trabajadores de la energía siempre declaramos que la política energética no es un tema privativo de especialistas o de los trabajadores del sector; es un tema que incumbe a toda la sociedad. El reclamo por nuestra soberanía energética se debe hacer sentir fuertemente en esta ocasión, con referencia a las reservas que pueden ofrecer las islas Malvinas, pero también por la recuperación de todos los recursos energéticos. Por la recuperación de la renta anual multimillonaria en dólares. Por la recuperación de los precios locales de la energía que hoy están artificialmente elevados y generan subsidios corruptos y tarifazos injustos.

Y fundamentalmente por la recuperación de políticas soberanas que nos representen como pueblo y nos liberen de la situación de dependencia que vivimos hoy y que solo los políticos entregados y entreguistas pueden defender.

* Publicado por FeTERA SEMANAL N° 545 -16.02.2010.
** Secretario de Organización de la CTA Nacional; Secretario General de la FeTERA, Vicepresidente del MORENO.

NOTAS :
(1) Caños sin costuras que Techint exporta del pais en un 60% de su producción. (2) “AQUELLA MAÑANA DE 1922. Una mañana de agosto de 1922, Mosconi se enteró que la empresa norteamericana WestIndia Oil Co., la única que vendía nafta de aviación, se negaba a suministrarla sin pago adelantado. El entonces coronel Mosconi entrevistó al gerente de la empresa, para ratificar la noticia. Si, era así, Mosconi le replicó al gerente de la compañía extranjera según cuenta en su libro: “Advierta que el servicio Aeronáutico del Ejército no debe un centavo a su compañía; que se trata de una repartición militar solvente y dependiente del Ministerio de Guerra y que, por lo tanto, no sólo me sorprenden sus manifestaciones y su exigencia, sino que las considero impertinentes y no las acepto”. Más tarde comentará Mosconi: “Allí, en el mismo escritorio me propuse juramentándome conmigo mismo, cooperar con todos los medios legales para romper con los trusts”. Pero todo se lo llevará el vendaval del 6 de septiembre de 1930, hasta que en 1931, el presidente Uriburu lo citó en la Casa Rosada para anunciarle –para ordenarle- que viajara a Italia en misión de estudios. Era un destierro disfrazado, y continuará –aunque retorne al país- en esa condición. El general Justo lo designará director del Tiro y Esgrima de Ejercito. Era algo inaudito. El viejo luchador quedaba relegado a un papel protocolar. Poco después un ataque de hemiplejia lo fulminaría y el 31 de diciembre era retirado de oficio como general de división. Inválido en el ostracismo político, fallecía el 4 de junio de 1940. Al memorar su ejemplo –un ejemplo vigente para estos días-, vale la pena recordar aquella sentencia en la que afirmó: “Es bueno vitorear a la Patria, pero es mejor ayudarla a vivir contribuyendo a su engrandecimiento y bienestar”. Por Emilio J. Corbière. Publicado en la revista Proyecto Energético Nº 83 (Julio- Septiembre 2008). (3) ¿Qué está pasando en Malvinas y Atlántico Sur? ”Desde hace varios años venimos denunciando la grave situación de permanente retroceso diplomático, político y económico de la Argentina en Malvinas y Atlántico Sur. “ Pero es en este último año cuando el RU ha concretado aceleradamente una serie de hechos que han agravado fuertemente este retroceso. En efecto durante el año pasado el Reino Unido: “En Marzo elevó una propuesta al Parlamento Europeo proponiendo transformar en europea la base militar inglesa en Malvinas. En Mayo presentó en la secretaria de CONVEMAR de las Naciones Unidas la extensión a 350 millas en torno a Islas Malvinas, Sándwich y Georgias del Sur. Se trata en total de una superficie de 3.500.000 km2, casi equivalente a todo el territorio continental argentino. “ En Octubre, en una actitud abiertamente belicista se conoció el envió de cuatro aviones TYPHOON de máxima tecnología de combate a la base militar Mont Pleasant en Malvinas , donde a la par se realizaron intensísimos ejercicios militares presididos por el Jefe de Estado Mayor Conjunto de las FFAA británicas. Además se nombró como gobernador de las islas a un militar británico proveniente de Irak, experto en misiones en regiones de alta conflictividad como Líbano e Irlanda del Norte.” En Diciembre entró en vigencia del Tratado de Lisboa que aprobó la Constitución Europea e incorporó como territorio de ultramar europeo a las islas Malvinas, Islas del Atlántico Sur y Territorio Antártico Británico. “ “Lamentablemente no ha habido por parte del gobierno nacional una mínima respuesta o cambio de estrategia ante esa escalada de hechos. Su única reacción fue el rezongo, cada vez más tardío y más estéril, consintiendo así en la práctica con esa escalada de hechos consumados. La política de seducción (“Winnie Pooh”) del ex canciller Di Tella, fue sustituida por la política del rezongo inconsecuente del actual gobierno, sin que para nada cambiaran sus resultados. Por contrario ,imitando esa política del “Winnie Pooh”, recientemente nuestra presidenta al asumir el mandato del Unasur, dijo que su principal objetivo era llegar a un acuerdo de Libre Comercio con la Unión Europea.” “Tampoco estos temas han sido objeto de preocupación alguna por parte de la oposición parlamentaria, la que parece vivir en Babia ante esta gravísima cuestión, que es el principal desafío geopolítico que Argentina y América Latina enfrenta en su historia, después de la gesta de su independencia. Nuevamente enfrentamos un agudo conflicto territorial con la principal potencia europea, habiéndonos convertido en estado corribereño de Europa, con una enorme zona de disputa de por medio, que cobija enormes riquezas hidrocarburíferas, mineras, e ictícolas.” (4) Félix Herrero en Diario Crítica el 07.02.10: “Cumplir con sus propias normas. Cuando en abril de 2007 la Secretaría de Energía Nacional dictó la Resolución 407, nadie, en nuestro País ni en el extranjero, la criticó como medida bélica”. “¿Qué dice esa Resolución vigente? que cualquier empresa que trabaje con permisos no otorgados por la Argentina no puede tener, al mismo tiempo, autorizaciones en el territorio y Mar Argentino. De acuerdo con la norma, en el caso que se verifique el incumplimiento de las obligaciones, no podrán actuar en nuestro mar y territorio “las empresas que desarrollen o hayan desarrollado actividades no otorgadas por la Argentina.” Entonces, para ser efectivo, el Gobierno Argentino debe elaborar y dar a conocer al pueblo la lista de empresas, británicas o de otros países, que estén vinculadas con las empresas petroleras o de servicios hidrocarburíferos que hayan recibido autorización kelper o de Londres para trabajar en el mar de nuestras Islas Malvinas, haciendo así posible la retroversión de los permisos que tengan en nuestro territorio.” (5) Wikipedia: Las Siete Hermanas: Debido al desmembramiento de Standard Oil, ordenado por el gobierno de los Estados Unidos a principios del siglo XX, se forman tres nuevas compañías, que junto a otras cuatro grandes del resto del mundo, conformarán las Siete Hermanas. Con un dominio casi total de la producción, refinación y distribución petrolera, el acuerdo entre ellas les permitió tomar ventaja de una demanda rápidamente creciente a nivel mundial y consecuentemente, obtener enormes ganancias. Con una notable organización y coordinación, estas siete compañías tuvieron un control completo del circuito petrolero gracias a su enorme influencia sobre los gobiernos de los países productores. No fue sino hasta 1960, con la creación de la OPEP y su posterior fortalecimiento durante la década de 1970, cuando la influencia de las Siete Hermanas comenzó a mermar. Las Siete Hermanas eran las siguientes empresas: Standard Oil of New Jersey (Esso), que al fusionarse con Mobil formó ExxonMobil (Estados Unidos). Royal Dutch Shell (Países Bajos, Reino Unido). Anglo-Iranian Oil Company (AIOC), luego conocida como British Petroleum (BP) (Reino Unido). Standard Oil of New York, luego conocida como Mobil. Hoy en día se encuentra fusionada y es parte de ExxonMobil (Estados Unidos). Standard Oil of California, luego conocida como Chevron. Se fusionó posteriormente con Texaco para formar ChevronTexaco. Actualmente su nombre es Chevron Corporation (Estados Unidos). Gulf Oil Corporation, que en 1985 fue adquirida casi totalmente por Chevron, mientras que la otra parte de las acciones quedó en poder de BP (Estados Unidos). Texaco, que se fusionó con Chevron en 2001. Esta fusión fue conocida durante algún tiempo como ChevronTexaco, pero en 2005 cambió su nombre nuevamente a Chevron. Texaco es ahora una marca de Chevron Corporation (Estados Unidos).


LAS REGALÍAS HIDROCARBURÍFERAS EN LA DESIGUALDAD FISCAL PROVINCIAL*

por Diego Mansilla** y Martín Burgos Zeballos**

El reparto de la renta petrolera entre el Gobierno Nacional, las provincias petroleras y las empresas impacta sobre la estructura económica en la que se asientan las relaciones políticas entre esos actores. Los autores evalúan el peso de las regalías hidrocarburíferas en las finanzas de las provincias petroleras, y el efecto que sobre ellas producen las retenciones impuestas por el Gobierno Nacional a las exportaciones.

INTRODUCCIÓN

La asunción en 2003 del primer presidente que fue gobernador de una provincia patagónica no solo fue resultante de una coyuntura política particular, vinculada a la necesidad de la clase política en su conjunto de legitimarse en ese momento, proponiendo nuevas figuras luego de la crisis económica, política e institucional en la cual había caído argentina en 2001. También es consecuencia de variables estructurales, como el creciente peso que tuvieron las provincias patagónicas en una economía argentina, donde los recursos naturales pasaron a ser un eje de modelo económico de los años noventa. Entre esos recursos naturales, sobresalen los del sector hidrocarburífero –gas y petróleo-, cuya privatización y creciente extranjerización favoreció la aparición de poderosas empresas de destacada incidencia sobre los destinos de las provincias patagónicas, y más generalmente, sobre la vida política argentina.

La relación entre la Nación y las provincias durante el período 2003-2007 fue marcada por una relación desigual, causada entre otros por la asimetría en la recaudación entre Nación y provincias. En efecto, la recaudación tributaria nacional se incrementó debido al crecimiento del mercado interno y a la implementación de nuevos impuestos (retenciones a las exportaciones e impuesto al cheque), reforzando de esa manera el poder del gobierno nacional. Sin embargo, durante el mismo período, los ingresos provinciales no se aumentaron en la misma medida, aunque veremos que existen diferencias entre provincias.

Uno de los ejes sobre el cual se tejen las relaciones económicas entre empresas petroleras, gobernadores patagónicos y el gobierno nacional es el reparto de la renta petrolera entre beneficios empresarios, impuestos nacionales y regalías provinciales. En este artículo, nos proponemos evaluar la importancia que tuvieron las regalías hidrocarburíferas sobre las finanzas públicas de las provincias petroleras, para luego analizar los efectos que tienen las retenciones recaudadas por la Nación sobre las regalías cobradas por las provincias petroleras. De esa manera queremos poner de relieve la estructura económica subyacente a las relaciones políticas entre los actores y las instituciones involucradas.

1- LAS REGALÍAS HIDROCARBURÍFERAS

Antes de entrar en un análisis de las características de la distribución regional de las regalías hidrocarburíferas en Argentina, conviene decir unas palabras sobre el concepto propio de regalía.

Históricamente, la regalía fue la forma más común de abonar la renta al propietario de los recursos naturales no renovables. Más allá de las definiciones teóricas sobre la manera de calcular la renta diferencial por parte de Smith y de Ricardo, la realidad nos indica que la renta presentó la figura de una ´renta consuetudinaria´ en forma de una regalía fija que era pagada al propietario, calculada como un porcentaje dado de la producción. Este fue el sistema que primó en la industria del carbón inglés por lo menos desde el siglo XVIII. Las ventajas de ese sistema eran que su administración era económica (no eran necesarios costos de control como en el caso de reparto de ganancias) y la recaudación de la renta se podía realizar sin riesgo de desactualización (como sucedía anteriormente con los montos fijos). Esta tradición se desplazó posteriormente a los primeros arrendamientos petroleros en Estados Unidos a partir de 1860 y de ahí al resto del mundo. La regalía consuetudinaria más frecuente, desde comienzo del siglo XIX, fue un octavo (12,5%), cifra que fue utilizada para los arrendamientos estadounidenses (1).

A diferencia de Estados Unidos, las regalías tuvieron en Argentina un papel menor en los primeros años de la historia petrolera. En efecto, a diferencia de la tradición anglosajona de dominio privado, la legislación española sobre las minas y yacimientos planteaba un claro dominio estatal. El primer antecedente en este sentido fueron las Ordenanzas de Minería de Carlos III (1783) donde se declaraba que “las minas son propias de mi Real Corona”. Sin embargo desde un comienzo existieron fuertes controversias sobre el dominio hidrocarburífero entre la Nación y las provincias (2) .

Luego del descubrimiento del petróleo en Argentina en 1907 en Comodoro Rivadavia (en ese entonces Territorio Nacional de Chubut), el Estado Nacional fue quien se encargó de su exploración y explotación, lo que volvió excepcional la figura de la regalía. En algunas áreas lindantes a los yacimientos estatales existían algunos permisos de cateo otorgados a privados (según el Código de Minería) que a su vez eran arrendados a empresas petroleras internacionales como la Shell o la Anglo Persian (actualmente BP) a cambio de una regalía.

El nacimiento real de las regalías en Argentina se remonta a 1935 cuando el congreso ratificó un decreto de Justo, permitiéndole a la petrolera estatal YPF operar en todas las provincias. Hasta ese momento, YPF llevaba adelante la mayor parte de la extracción petrolera, pero sólo operaba en los Territorios Nacionales (principalmente Chubut y Neuquén). Las provincias con reservas (particularmente Salta, Jujuy y Mendoza) habían acordado una política de acuerdo con las petroleras internacionales, no otorgando permisos de cateo a la petrolera estatal. Por la Ley 12.161/35, YPF podía operar en todas las áreas provinciales que no hayan sido arrendadas a otras petroleras, pagando una regalía a la provincia del 12% del valor extraído(3) . A partir de ese momento, las regalías fueron el pago que YPF (y posteriormente las petroleras privadas) realizaban a las provincias (o al Estado Nacional en los Territorios Nacionales y el Mar Argentino). Si bien la alícuota (12%) continuó vigente desde 1935 (siendo actualmente una de las más bajas del mundo), en sucesivas legislaciones se modificó el precio al que se valorizan los hidrocarburos y los costos que deben descontarse del precio para llegar al “Valor a Boca de Pozo” -sobre el que se calcula el 12% de regalías (4) .

Actualmente, las regalías se pagan sobre el precio de mercado al que se venden los hidrocarburos, valorizados a ´Boca de Pozo´(conocido como ´playa de tanques´) por lo que se debe descontar fletes y seguros así como los gastos y tratamientos necesarios para la venta del producto (5) . Para el caso del Gas Natural, el precio relevante es el de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires al que se le descuentan los costos de transporte (independientemente de donde se venda el gas). Luego de la devaluación del 2002 y el aumento de los precios internacionales, las retenciones se transformaron en el principal descuento sobre el precio de mercado (que además no son coparticipables) (6) . En 2004 se estipuló un sistema de retenciones móviles por el que se abona una retención neta de 31% para valores internacionales superiores a U$S 45 por barril (7). Finalmente, la última modificación se realizó a fines de 2007 mediante la resolución 394, se creó un sistema en que las retenciones dejan fija la remuneración al exportador (U$S 42 por barril), debiendo abonarse como retenciones la diferencia entre este valor y el precio internacional. Sin embargo, a partir de octubre de 2008, el precio de las exportaciones se mantuvo por debajo del valor de referencia para dicha alícuota (U$S 60,9 por barril o U$S 383 por m3) por lo que desde entonces se regresó a la retención del 31%. Más adelante se describirá mejor el funcionamiento actual de las retenciones.

2- DISTRIBUCIÓN GEOGRÁFICA DE LOS HIDROCARBUROS

En el territorio argentino, existen 11 cuencas sedimentarias de las cuales en 5 (Noroeste, Cuyana, Neuquina, Golfo San Jorge y Austral) que tienen una extensión de 590.000 Km2 se encontraron hidrocarburos en condiciones comerciales. Sin embargo, las reservas y extracción de hidrocarburos se concentran en pocas provincias. Apenas 4 provincias acaparan el 84% de la extracción de los últimos 10 años para el petróleo y el 82% para el gas. En este último caso, se observa una fuerte preponderancia de la provincia de Neuquén, mientras que en el de petróleo, a pesar de ser importante, esta pierde participación en comparación con la provincia de Chubut.

CUADRO I
Distribución de Extracción Hidrocarburífera por Provincia

Si bien el precio del gas natural ha mejorado desde 1993 (año de la desregulación), la recaudación por regalías gasíferas es menor que el ingreso petrolero (sobre todo luego de los aumentos del precio del petróleo desde 2001). Esto hace que las provincias esencialmente gasíferas (como Salta o Tierra del Fuego) reciban menores importes que las petroleras, como puede apreciarse en el siguiente cuadro. Además, las diferentes calidades del petróleo argentino hacen que las provincias con petróleo más liviano (Neuquén, Mendoza o Río Negro) obtengan por su producción precios más altos que los de las provincias con petróleo más pesado (como Chubut o, Santa Cruz) y por tanto mayores regalías

En el cuadro II se observa claramente como apenas 4 provincias (lideradas por Neuquén) acaparan año a año más del 80% del total de las regalías hidrocarburíferas (petróleo y gas). Como se mencionó, las provincias esencialmente gasíferas reciben importes menores con respecto a las petroleras, marginando a provincias como Tierra del Fuego, a priori consideradas como grandes beneficiarias de la industria hidrocarburífera.

Sin embargo, todas las provincias mejoraron los montos recibidos en concepto de regalías, aumentando el total distribuido un 75% entre 2003 y 2007. Cabe aclarar que a nivel nacional la extracción de petróleo cayó entre esos años un 13% mientras que la de gas natural apenas aumentó un 0,4% (8) . Es decir, el aumento de las regalías cobradas se debió más a un aumento del precio de referencia (atado al internacional) que a un aumento de las cantidades extraídas (salvo en el caso de Chubut que experimentó un importante aumento en la extracción).

Cuadro II
Distribución de Regalías Hidrocarburíferas 2003-2007


En el gráfico 1 se muestra la estrecha relación existente desde 1994 entre los montos cobrados por regalías a nivel nacional y el precio internacional del petróleo (descontado las retenciones desde 2002), casi independientemente de los cambios en la extracción petrolera y gasífera. Dicha correlación se debe a la desregulación de 1989, que provocó la internalización del precio internacional del petróleo, independientemente de los costos efectivos de extracción; esto a pesar de que Argentina es un país con autoabastecimiento que llegó a exportar hasta el 40% del petróleo crudo. Por ese motivo, internamente, el petróleo se comercializa a las refinadoras a precio de ´paridad de exportación´(precio internacional menos retenciones y fletes) (9) y es la base sobre la que se calcula las regalías a pesar de que en la actualidad, el 80% del petróleo crudo extraído en nuestro país sea refinado internamente y no exportado.

En el contexto de precios internacionales récord -mayores a los vigentes al momento de la firma de las concesiones- no aumentó la participación estatal en la apropiación de la renta petrolera (a diferencia de muchos países del mundo). Mientras que países como Bolivia, Venezuela, Ecuador o Canadá, por ejemplo, implementaron impuestos a las ganancias extraordinarias, aumentaron las
regalías o la participación de las empresas estatales, en Argentina las empresas extranjeras que extraen el petróleo y el gas obtuvieron rentas extraordinarias, como se observa en sus balances.

3- LA DISTRIBUCIÓN DE LOS RECURSOS FISCALES ENTRE PROVINCIAS

A continuación presentaremos algunos aspectos de las finanzas públicas provinciales que resultan de interés para el estudio de las regalías.

En primer lugar nos referiremos a la relación entre las Provincias y la Nación, la cual por cuestiones históricas constituyen un caso particular de federalismo. Desde el punto de vista fiscal, Argentina se distingue por tener una fuerte concentración de la recaudación de los impuestos en la Nación, mientras que la descentralización del gasto se fue acrecentando en las últimas décadas, especialmente en lo referido a la salud y la educación.

GRÁFICO 1- Relación Regalías – Precio Internacional


En la práctica, los impuestos recaudados por las Provincias son el inmobiliario, el automotor, a los sellos y a los ingresos brutos, el resto quedando en manos del gobierno nacional. Sin embargo, una parte de los impuestos recaudados por el Estado nacional –básicamente el IVA, el impuesto a las Ganancias y el impuesto al cheque- se redistribuyen a las Provincias bajo la forma de coparticipación federal de impuestos, mientras otros -como los impuestos al comercio exterior (retenciones y aranceles aduaneros)- no eran coparticipables durante el período analizado y eran de uso exclusivo de la Nación (10) .

En ese esquema, resultan fundamentales las transferencias de la Nación hacia las Provincias con criterio redistributivo para equiparar los recursos entre regiones. Esto fue explícito en la ley 20.221 de coparticipación federal de impuestos que tuvo vigencia del año 1973 hasta 1984, donde los recursos se repartían en función de la población, las brechas de desarrollo y dispersión de la

población. Sin embargo, desde 1984 este importante instrumento de redistribución del ingreso entre las Provincias no tuvo un criterio claro de reparto, y fue distribuido en función del poder de negociación de cada gobierno provincial.

Más allá de la relación con la Nación, las fuertes disparidades existentes entre las estructuras económicas de cada provincia conllevan distintas capacidades de recaudación. Esto es un serio obstáculo a la posibilidad de aplicar la correspondencia fiscal, según la cual cada provincia financie con impuestos propios sus gastos (Cetrángolo y Jiménez, 2004). Este aspecto puede apreciarse en el siguiente gráfico, que muestra la relación entre el peso económico de cada Provincia (11) y el grado de autonomía de cada una, medida como el porcentaje de sus ingresos propios en el total para el año 2006.

Gráfico 2
Entre las provincias con mayor grado de autonomía, se distingue dos grupos: en primer lugar las de mayor desarrollo productivo (Ciudad de Buenos Aires, Provincia de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Mendoza), y por otro lado las patagónicas (Neuquén, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Río Negro) (12). Si agregamos la evolución de las finanzas provinciales de las 6 provincias petroleras (las 5 provincias patagónicas y Mendoza) notamos que la recomposición de sus ingresos luego de la crisis del 2001 es mucho más rápida que la del resto del país, ya que en el año 2002, estos se incrementan un 24% respecto del año anterior, mientras que en el resto del país solo aumentan 5%.

Sin embargo, dichos guarismos no pueden atribuirse exclusivamente al efecto de la devaluación sobre la recaudación por regalías a la producción exportada, sino también a los aumentos registrados en el precio del petróleo crudo que suben 34% entre 1999 y 2001. Esto se refleja en un crecimiento de los ingresos corrientes de 1998 al 2001, cuando el resto de las provincias vivía una fuerte reducción de los mismos. La influencia de las regalías en este resultado diferenciado de los ingresos corrientes de las provincias petroleras se refleja en el aumento del peso de las regalías en la composición de los ingresos provinciales que pasan de 13% de los ingresos corrientes de las PP en 1998 al 36% en el año 2003.

Estos rasgos configuran una situación novedosa, en la cual las provincias petroleras se benefician de un mayor grado de autonomía respecto del resto de las provincias. Se pone de relieve la evolución de la autonomía de las PP a través de un indicador que resulta del cociente entre los ingresos propios (ingresos tributarios provinciales y regalías) y los ingresos corrientes.
Por el lado del gasto de las PP, este se compone en primer lugar de los salarios. Sin embargo, su peso en el total del gasto es menor que en el resto de las provincias, y el ajuste del año 2002 no implicó reducción de masa salarial en términos absolutos al contrario del resto de las provincias. En 2003, inclusive, se da en el agregado un aumento de la masa salarial del 14%, tal vez debido a una mejor evolución en sus ingresos corrientes. Un análisis desagregado por provincias nos muestra que la Provincia de Santa Cruz es la de mayor densidad de empleado público del país, superando incluso La Rioja (Cetrángolo et al., 2002) 13.

En consecuencia, las PP ostentan buenos resultados en comparación con las demás provincias argentinas. Esto puede medirse con un indicador de fortaleza fiscal (el cociente entre el resultado primario y los gastos primarios) donde el conjunto de las PP tiene una evolución positiva desde el año 2002, mientras que el resto de las provincias mejora recién en el año siguiente. La Provincia de Buenos Aires se consideró aparte del resto debido a su peso en el total y su evolución particular.

Esa evolución nos muestra que las PP tienen mayor capacidad de respuesta para realizar determinada política, como aumentos de sueldos a docentes o estatales, por ejemplo. Al respecto, el análisis que realiza la CTA (14) muestra que, para el año 2006, todas las provincias petroleras tomadas separadamente alcanzan un nivel de fortaleza fiscal superior al promedio nacional, salvo Tierra del Fuego (cuyo ingreso por regalías es menor).

Por lo señalado anteriormente, podemos concluir esta parte diciendo que, debido principalmente a la ventaja de cobrar regalías hidrocarburíferas, las finanzas públicas de las provincias petroleras lograron un mayor grado de autonomía respecto de la Nación, posibilitándoles mayor libertad de acción en el manejo de sus gastos.

4- ESTIMACIÓN DE LA DISTRIBUCIÓN DE LA RENTA PETROLERA 2003-2008

Hemos descrito la importancia de las regalías en los presupuestos provinciales de las provincias petroleras. Como se mencionó, las retenciones son uno de los mayores descuentos sobre el precio internacional que reciben las provincias a la hora de cobrar las regalías. Esto explica el motivo por el cual desde la imposición de las retenciones a las exportaciones de petróleo crudo y gas natural, las provincias petroleras se encontraron entre las principales voces opositoras, alineándose con los intereses de las empresas privadas. Esta posición se hizo más evidente con el aumento de las retenciones a los hidrocarburos mediante un sistema de alícuotas móviles (tanto al petróleo crudo como a los subproductos, anteriormente gravados con alícuotas sensiblemente menores) firmado en noviembre de 2007. Las provincias y varios medios de comunicación se hicieron eco de los reclamos de las petroleras de que las retenciones “desalientan la inversión” y provocarán el desabastecimiento (15).

GRÁFICO 3- Fortaleza Fiscal – Resultado primario / Gasto primario

En términos económicos, las provincias petroleras aducen que el cobro de retenciones creadas en 2002 (que con el tiempo se fueron haciendo cada vez más importantes, al compás del aumento del precio internacional) implicó un nuevo descuento para las empresas a la hora de pagar las regalías, a pasar de lo indicado en la propia Ley 25.561. Como las retenciones no son coparticipables, la totalidad de lo recaudado fue a las arcas nacionales. Se concluía que las provincias

petroleras perdían parte de su recaudación y, en consecuencia, parte de sus “grados de libertad” respecto de la Nación.

Lo que esconden estos debates es el reparto de la renta petrolera. Si bien, como lo vimos, los montos abonados como regalías aumentaron desde 2002 (producto del gran aumento de precios ya que los volúmenes extraídos caen desde ese año), la participación de las provincias en la apropiación de la renta petrolera bajó, a la vez que aumentó la participación de la Nación. En tanto, las empresas petroleras extranjeras continúan apropiándose de gran parte de la renta petrolera argentina y la participación estatal (sumando la provincial con la nacional) es de las más bajas del mundo.

Para poder demostrarlo, se estimó la renta petrolera argentina y su distribución para el período 2003-2008 entre Provincias, Nación, Empresas y Consumidores / Refinadoras (16). Las Provincias se apropiarán únicamente de las regalías (17), calculadas sobre el valor de venta interno o externo menos retenciones . La Nación obtendrá las retenciones a las exportaciones y el correspondiente al 35% de las ganancias extraordinarias de las empresas (por impuesto a las ganancias). El monto de la renta que es apropiado por los consumidores / refinadoras se debe a la diferencia entre el precio internacional y el interno que abonan las refinadoras. Sin embargo, no es posible saber cómo se distribuye entre ellos esa parte de la renta petrolera. Si las refinadoras vendieran la totalidad de los subproductos en el mercado interno manteniendo ese descuento, esta renta sería apropiada por los consumidores. En cambio, si los subproductos destilados se vendieran a precios internacionales, el 100% de esta renta iría para las refinadoras. Actualmente, nos encontramos en un punto intermedio y a medida que aumenta el precio internacional del petróleo y se mantiene el de los destilados, la apropiación por parte de los consumidores es mayor. No obstante, dado que los precios internos no son al costo y que la participación de las exportaciones en las ventas de las refinerías es elevada (llegando al 50% aunque reduciéndose año a año), la participación de estas últimas en la apropiación de esta renta no es despreciable (18) . Las empresas obtienen como ganancia extraordinaria la diferencia entre los importes abonados y la renta apropiada por los otros actores.

Como se observa, la renta petrolera total (es decir, el petróleo extraído valorizado por el precio internacional menos el costo de extracción y una ganancia normal) llega a más que duplicarse entre 2003 y 2008. Esto se debió al aumento de precios ya que las cantidades extraídas cayeron un 15% en el mismo período. Si bien cada participante aumentó su factura petrolera en términos absolutos, la participación del sector público (nacional y provincial) cayó del 41% en 2003 al 21% en el 2008. Considerando sólo la parte realizada de la renta (es decir, excluyendo la renta apropiada por los consumidores y las refinadoras por menores costos) la participación estatal pasa del 48% al 54%.


Esto es producto de la importancia que tomó en los últimos años la parte de la renta apropiada por Consumidores y Refinadoras , producto de la separación del precio interno del internacional. Esto es particularmente importante en el año 2008 cuando la resolución 394 impuso (hasta el mes de octubre) un precio interno de u$s 47 para el barril de petróleo de mayor calidad, mientras el precio internacional marcaba niveles récord, casi alcanzando los u$s 150. Esto, sumado a la menor participación de la apropiación estatal vía retenciones, es una muestra que la principal consecuencia de la política de retenciones petrolera fue la separación del precio interno del internacional, más que un aumento de la recaudación.

Es necesario hacer una aclaración sobre los importes estimados para el gobierno nacional. Como se mencionó (y se muestra en el Apéndice), se consideran las retenciones a las exportaciones y el pago de impuesto a las ganancias (35%) sobre las beneficios extraordinarios de las empresas. Como los volúmenes exportados caen dramáticamente (exportándose en el 2008 un 75% menos que en 2003), los importes de las retenciones son bajos (998 millones de dólares en 2008, apenas el 35% de lo recaudado por el Estado Nacional). Por tanto, la mayor parte de los ingresos nacionales se debe a los impuestos a las ganancias que ´correspondería´ cobrar a las empresas petroleras. Sin embargo los montos efectivamente percibidos en concepto de impuestos a las ganancias por parte de la Nación son cuantiosamente menores (19) .

Por último se observa que las regalías, que por ley deben ser el 12% del valor del petróleo extraído, apenas representan el 6% de la renta petrolera en 2008. Sobre el valor en que el petróleo es efectivamente vendido (ya sea en el mercado nacional o internacional), la participación de las regalías es del 10,8%. Esta diferencia en parte está explicada por los descuentos provocados por las retenciones.

Luego de estas consideraciones acerca de la distribución de la renta petrolera, a continuación realizaremos un ejercicio tendiente a simular como se hubiese repartido dicha renta de no haber existido las retenciones a las exportaciones, haciendo hincapié en los montos abonados como regalías a las provincias. De esa manera podremos cuantificar la pérdida de recaudación y ver quienes serían los más favorecidos por la eliminación de las retenciones.

En un primer momento, sólo se consideró a las retenciones como “impuesto a las exportaciones”, es decir tomando en cuenta solo su papel fiscal, y suponiendo que la eliminación de las retenciones no tendría impacto en términos de precio interno de los subproductos, inflación, pobreza, distribución del ingreso, tipo de cambio real, etc. Con estas consideraciones metodológicas, se llegó a los siguientes resultados:


De esta manera se demuestra que, si bien la eliminación de las retenciones genera un aumento de ingresos para las provincias petroleras en carácter de regalías, el importe no sólo es menor al reclamado por las provincias (apenas 120 millones en el 2008, lo que representa un aumento del 10%) sino que el monto que debe resignar el Estado Nacional supera ampliamente la ganancia de las provincias (20) . A su vez, los beneficios de las empresas petroleras hubiesen mejorados en casiU$S 2.400 millones durante el período 2003-2008. Estos resultados dejan en claro que estas últimas serían las principales beneficiarias de una eliminación de las retenciones (o de su disminución).

Sin embargo, como se mencionó, para ese ejercicio se mantuvo el precio interno del petróleo crudo. Si hubiéramos supuesto que, durante el año 2008, la eliminación de las retenciones impactaría en un aumento de precios internos, las regalías habrían llegado a U$S 2.684 millones (U$S 1.470 millones por sobre lo estimado). Pero los consumidores argentinos habrían pagado el triple por todos los subproductos derivados del petróleo (que incluyen tanto combustibles como energía eléctrica, medicamentos, plásticos y fertilizantes) con el consecuente aumento en todos los precios de la economía y generando enormes ganancias a las petroleras extranjeras que extraen el petróleo argentino.

Mediante la resolución 394 de noviembre de 2007, el gobierno nacional aumentó las retenciones a las exportaciones, estipulando en U$S 42 la retribución a las empresas petroleras. No obstante, el mayor impacto de esta medida es el aumento en las alícuotas para la exportación de subproductos (especialmente las naftas) llegando a un mínimo de 31% contra el 4,7% vigente anteriormente, además de bajar la ´paridad de exportación´ a la cual se comercializa el petróleo en el mercado interno. Como se mencionó, su mayor consecuencia fue el alejamiento del valor interno del petróleo del precio internacional.

En el 2008, luego de la presión de las provincias petroleras, una resolución estipuló que los U$S 42 por barril se refiere al petróleo “Escalante” que se exporta (es un petróleo ´pesado´) (21) por lo que para pagar las regalías, se debe ajustar el precio de los petróleos ´livianos´ (como los de Neuquén o Salta) llegando a casi U$S 47. Esta medida, a la vez que aumenta la recaudación por regalías de estas provincias, sirvió a las petroleras para exigir un ajuste de precios a las refinadoras, con la consecuente presión sobre precio de los subproductos. Además, según el artículo 2, “se analizará la posibilidad de resarcimiento al fisco provincial” cuando el barril supere los U$S 95. Sin embargo, no aclara de qué manera se realizará ese resarcimiento y si el mismo correrá por cuenta de las empresas o de la Nación (como parece indicar la medida). A pesar de que el valor internacional superó esa cifra, no se avanzó en el tema sin que a la fecha se sepa si dichos resarcimientos serán abonados.

Según un informe de la OFEPHI (Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos que agrupa a las provincias petroleras) publicitado en los medios, con el aumento de las retenciones las provincias perderían hasta U$S 1.300 millones, al bajar el precio en ´boca de pozo´(22) . Más allá que esa pérdida es imposible (ya que es mayor a lo cobrado en 2008), interesa saber el impacto fiscal de la Resolución 394. El precio fijo de U$S 42 por barril para el exportador (y U$S 47 para el mercado interno) estuvo vigente desde diciembre de 2007 a octubre de 2008, mientras que el precio internacional de referencia superó los U$S 60,9 por barril. Para esos meses se hizo el ejercicio de calcular la distribución de la renta en caso de haberse mantenido el anterior sistema.
Se observa que de no haberse implementado las retenciones móviles, la recaudación de retenciones hubiera disminuido en U$S 461 millones. No obstante, el mayor impacto se hubiera sentido en el mercado interno ya que la parte de la renta apropiada como resultado de la separación del precio interno del internacional se ve disminuida en U$S 5.530 millones. Como se suponía, la eliminación de la Resolución 394 implica una mayor recaudación por parte de las provincias al aumentar el precio al que se vende el petróleo (tanto internamente como exportado), llegando a una diferencia de U$S 709 millones. Pero el principal beneficiario hubiera sido las empresas petroleras privadas que extraen el petróleo argentina, que aumentan sus ganancias extraordinarias en U$S 3.316 millones.

Con respecto al sector público nacional, la estimación muestra que, si bien las retenciones caen, las ganancias extraordinarias de las empresas son tan importantes que los impuestos a las ganancias que corresponderían cobrar más que compensan esa menor erogación. Esto esta indicando que la Resolución 394, antes de aumentar la recaudación, tuvo un efecto fiscal negativo de U$S 1.325 millones. Esto se debe a que, si bien aumentan los montos cobrados por retenciones(23), la mayor alícuota se cobra sobre las exportaciones que representan apenas el 8% de la extracción del período. Sin la Resolución 394, el petróleo exportado pagaría menos retenciones, pero el 92% del petróleo extraído que se vende en el mercado interno, hubiese tenido un precio promedio de U$S 74,5 en vez de U$S 47. Ese cambio en los precios hubiera generado grandes excedentes a las empresas cuyas erogaciones del impuesto a las ganancias superarían con creces la menor recaudación por retenciones .

Nuevamente, estos montos se basan en el supuesto de que las petroleras abonan la totalidad de los impuestos a las ganancias. En caso de que, como se observa en la práctica, las empresas logren eludir parte de su carga fiscal, las ganancias extraordinarias del sector privado petrolero aumentarán aún más. Se podría argumentar que las voces que se opusieron a las retenciones móviles argumentando que el objetivo estatal era aumentar la recaudación (incluyendo a las propias empresas petroleras), tenían claro que las petroleras no abonan lo que les corresponde como parte del impuesto a las ganancias.

CONCLUSION

Como lo vimos, aún en un contexto de recesión como el vivido durante el período 1999-2002, las cuentas públicas de las provincias petroleras muestran una fortaleza destacada. Desde entonces sus grados de autonomía fiscal respecto de la Nación aumentaron, mientras las demás provincias seguían muy dependientes de los recursos de la coparticipación federal de impuestos. Esta evolución tiene su explicación en los aumentos de los precios internacionales del petróleo y del tipo de cambio, los cuales supusieron un aumento de la renta petrolera y, en consecuencia, un aumento de la recaudación por regalías.

Como también pudimos ver, la distribución de la renta petrolera está influida por las decisiones de política económica del gobierno nacional, entre las cuales deben mencionarse en primer lugar las retenciones a las exportaciones. En ese sentido, las provincias petroleras centran sus reclamos en el Poder Ejecutivo Nacional pidiendo la disminución de las retenciones a los hidrocarburos, de manera de aumentar la parte provincial en la distribución de la renta petrolera.

Sin embargo, tal como lo demostramos en el presente artículo, una reducción o eliminación de dichas retenciones tendría efectos negativos para las cuentas públicas argentinas (tomando en conjunto Nación y Provincias), además de los efectos macroeconómicos que supondría el aumento del precio del petróleo crudo en el conjunto de la actividad económica y su impacto sobre los indicadores sociales. Asimismo, los principales beneficiarios de una reducción o eliminación de las retenciones a las exportaciones serían las empresas privadas, que aumentarían su parte en la distribución de la renta petrolera.

Si se tratara de mejorar las cuentas públicas de las provincias petroleras, existen varias medidas alternativas a la reducción de las retenciones, que no supondrían pérdidas para las cuentas públicas consolidadas ni mayores ganancias para las empresas petroleras. Entre ellas, debe tomarse en consideración el aumento de la alícuota de las regalías hasta el 12% real -tal como establece la ley- que sólo disminuirá los ingresos extraordinarios de las petroleras.

Recién en 2007 empezaron a escucharse pedidos de las provincias petroleras (agrupadas en el Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos –OFEPHI) orientados a aumentar la alícuota de las regalías, modificando para ello la Ley de Hidrocarburos Nº 17.319/67. La provincia de Neuquén, por ejemplo, exigió una alícuota de regalías un 3% mayor, como condición para prorrogar las concesiones de Repsol que vencen en 2017. Sin embargo, este criterio no fue tomado en cuenta a la hora de prorrogar los mayores yacimientos argentinos, Loma de la Lata en Neuquén y Cerro Dragón en Chubut y Santa Cruz (aunque Santa Cruz considera un aporte especial del 3% sobre los ingresos netos).

Por último se demostró que el principal impacto de la Resolución 394/07, que impuso retenciones móviles a los hidrocarburos siguiendo el precio externo, fue la separación del precio interno del internacional, aumentando en gran forma la parte de la renta petrolera apropiada por los consumidores y las refinadoras locales. De no haberse instaurado el sistema -si bien las provincias hubieran recibido mayores regalías- las petroleras se hubieran beneficiado con los precios extraordinarios del petróleo a costa de mayores precios en el mercado interno. Además, los importes que las petroleras tendrían que haber pagado de impuesto a las ganancias hubieran más que compensado los menores ingresos por retenciones, por lo que las denuncias de medios, políticos y petroleras de que la Resolución tenía intenciones fiscalistas, están reconociendo implícitamente que las petroleras no abonan la totalidad de los importes correspondientes a dicho impuesto.

APÉNDICE

Fórmulas para la estimación de distribución de la renta petrolera.

Y= Y* + Yn donde Y = extracción total
Y*= exportaciones
Yn= extracción vendida al mercado interno
Provincias
Rt = R + R*
R*= Y* .( P*-RX -0,5).12%
R= Yn (Pn-0,5). 12%
donde Rt= Renta apropiada por Provincias
R = Regalías por consumo interno
R* = Regalías por exportaciones
Pn = precio nacional
RX= retenciones
P* = precio internacional
Nación
N= RX.Y* + (Y.Pn - R-C). 35%+ [(P*-RX).Y*-R*-C].35%
donde N= Renta apropiada por Nación
C= costos de extracción
Distribución/Consumidores
DC= Yn.(P*-Pn) donde DC= Renta apropiada por Mercado Interno

Empresas
B=Y.P*-N-Rt-DC-C donde B= Renta apropiada por Petroleras


NOTAS

1.Mommer, B. (2003)
2.Ver una historia de la legislación hidrocarburífera referida a la relación entre Nación y Provincias y los debates que ésta generó hasta la Ley 26.197/06 que ´federalizó´ las reservas en Hidalgo (2009)
3.En esta ley se reconocía el dominio privado de las provincias, manteniendo el criterio del Código de Minería Hidalgo (2009)
4.La Ley de Hidrocarburos vigente 17.319/67 establece regalías del 12% que podrán ser reducidas hasta el 5%. Esto fue modificado por la ley 26.197 conocida como “Ley Corta”, que permite a las provincias cobrar regalías superiores. Sin embargo, la tasa para casi la totalidad de la explotación hidrocarburífera sigue siendo el 12%.
5.Lanardonne T. (2008)
6.Cabe aclarar que en el Artículo 6° de la Ley 25.561 de 2002, que modificó la Ley de Convertibilidad y estipula las primeras retenciones a la exportación del petróleo, se dictamina que “En ningún caso el derecho a la exportación de hidrocarburos podrá disminuir el valor boca de pozo, para el cálculo y pago de regalías a las provincias productoras”. No obstante, desde entonces las retenciones son descontadas del precio internacional para obtener el valor ´a Boca de Pozo´. Si bien la provincia de Neuquén obtuvo una medida cautelar favorable para que las empresas abonen las regalías según esta Ley, la misma no tuvo efecto, tanto por cuestiones formales (las provincias no deben presentar amparos) como de fondo (las regalías deben liquidarse sobre el importe real de venta y no sobre el ´precio internacional´ que es apenas un indicador). Abella A. et. al (2005)
7.La Resolución 532/04 impuso una retención del 25% más una sobretasa según la cotización del crudo WTI (indicador del mercado norteamericano) que, para montos superiores a U$S 45, es del 20%. Sin embargo, según la Ley 21.453 se estipula que el precio internacional contiene el monto de las retenciones, por lo que la erogación real baja. Ver Mansilla, D. (2007)
8.Con diferencias provinciales, como se observó en la evolución de la distribución de la extracción petrolera. Mientras que Chubut aumentó su extracción un 30%, Neuquén disminuyó un 24% en el mismo periodo
9.En realidad, esto es válido únicamente para las ventas a las refinerías no-integradas como Esso o Shell ya que Petrobras y Repsol (que refinan el 68% del crudo) son petroleras que extraen su propio petróleo por lo que este precio existe sólo en los libros contables. Para ellas, el precio del petróleo sigue siendo el costo de extracción más el de trasporte.
10.A principios del año 2009, el gobierno nacional decretó la coparticipación del 30% de lo recaudado en concepto de retenciones a las exportaciones de soja y sus derivados, destinando de esa manera una suma estimada con los precios actuales a 2.500 millones de pesos a las arcas de las provincias, de los cuales 40% corresponderán a las provincias de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. De ese modo, esas provincias recibirán el equivalente a 6% de sus ingresos corrientes por dicho concepto y empezarían a incidir en la distribución de la renta agraria
11.El peso económico se midió para el año 2001, año del último censo poblacional
12.Nótese que Mendoza se considera una provincia desarrollada económicamente, y a su vez es una provincia petrolera ya que 15% de sus recursos provienen de regalías. Por otra parte -aunque tenga una parte importante de reservas de gas- se excluye a la provincia de Salta del análisis, dado que las regalías cobradas representaban menos de 15% de sus ingresos corrientes en 2006
13.En el estudio mencionado, se calculó una densidad de 86 empleados públicos por cada mil habitantes para Santa Cruz, 85 para la Provincia de La Rioja y un promedio de 37 para el total del país.
14. Lozano C., Larrosa R. y Raffo T. (2007) “Situación fiscal y financiera de las Provincias”, IDEP-CTA
15.Ver por ejemplo “Provincias y sindicatos reclaman al Gobierno por aumento de retenciones” El Cronista 18/12/07, “Además de otros aumentos de las naftas, las retenciones provocaran falta de gasoil” Perfil 18/11/07 o “Otro desaliento a la inversión petrolera” La Nación 17/11/07.
16.La metodología se obtiene en Mansilla (2006) y Mansilla (2007). En el Apéndice se expresa analíticamente la forma de calcular la renta y su distribución. La renta no incluye la ganancia ´normal´ de las petroleras (supuesto en 20% sobre costos). Se consideró el cambio en las retenciones por la resolución 394 a partir de diciembre de 2007 a octubre de 2008, estimando la distribución en forma mensual para ese período
17.Como se explica en el Apéndice, el precio interno y las regalías se calcula por la fórmula correspondiente para la provincia de Neuquén (cuyo petróleo es más caro que el del resto del país), por lo que se está sobrevaluando la recaudación por regalías
18.La separación entre empresas extractoras y empresa refinadoras es un supuesto ya que, como se mencionó, la mayor parte de la refinación de crudo está en manos de empresas integradas (Repsol y Petrobras) por lo que el costo del petróleo no es la ´paridad de exportación´ sino el costo de extracción (alrededor de U$S 10 por barril)
19 Esto puede deberse a varios estratagemas de las empresas para eludir el pago de impuestos, como por ejemplo que las empresas integradas puedan utilizar precios de transferencia a los fines de contabilizar más o menos ganancias en algún sector de la cadena.
20 Cabe aclarar que el importe cedido por la Nación es menor a lo recaudado por retenciones ya que se contabiliza un mayor devengamiento de impuesto a las ganancias de las empresas (cuyo cobro es mucho más difícil que las retenciones).
21 Disposición 1/08 de la Secretaría de Combustibles.
22 “Provincias dejan de cobrar hasta U$S 1.300 millones por más retenciones al crudo”, Ámbito Financiero, martes 4 de diciembre de 2007.
23 En la estimación de la recaudación sin la resolución 394 no se considera, por ejemplo, la menor erogación por impuesto a las ganancias de las refinadoras (cuyos costos aumentarían) ni el enfriamiento de la economía que hubiese generado la duplicación del precio de los combustibles.



BIBLIOGRAFÍA

Abella, A., Albarenque J. y Peralte M (2005) “Tratamiento impositivo y jurídico de las regalías en la Argentina” en revista Petrotecnia agosto de 2005.

Cetrángolo O. y Jiménez J.P. (2004) “Las relaciones entre niveles de gobierno en Argentina.” Revista de la CEPAL Nº 84.

Cetrángolo O., Jiménez J.P., Devoto F. y Vega D. (2002) “Las finanzas públicas provinciales: situación actual y perspectiva.” Serie Estudios y Perspectivas Nº 12. CEPAL.

Gaggero J. y Grasso F. (2005) “La cuestión tributaria en Argentina. La historia, los desafíos del presente y una propuesta de reforma.” CEFID-AR

Hidalgo E. (2009) “Competencias de la Nación y las provincias en la explotación de hidrocarburos en la Argentina”. Realidad Económica N° 241

Lanardonne T. (2008) “Regalías Hidrocarburíferas. Análisis e Instructivo para su Cálculo”. Suplemento de Derecho Económico, ElDia.com en http://www.eldial.com/suplementos/economico/tcdNP.asp?id=4056&id_publicar=6602&fecha_publicar=21/11/2008&ca

López R. (2003) “Imponernos. Progresividad y recaudación en el sistema tributario argentino”. CCC

Lozano C., Larrosa R. y Raffo T. (2007) “Situación fiscal y financiera de las Provincias”, IDEP-CTA.

Mansilla D. (2006) “Una aproximación al problema de la renta petrolera en la Argentina (1996-2005)” Realidad Económica Nº 223. IADE.

Mansilla D. (2007) “Hidrocarburos y política energética. De la importancia estratégica al valor económico: desregulación y privatización de los hidrocarburos en Argentina”. CCC.

Mommer B. (2003) “Petróleo global y estado nacional”, Comala.com

Piffano H. (2004) “Los recursos no renovables en un sistema federal” en Porto A. (Director) “Disparidades regionales y federalismo fiscal”, EDULP.

Rofman A. (1999) “Las economías regionales a fines del siglo XX. Los circuitos del petróleo, del carbón y del azúcar.”, Ariel.

Solberg C. (1986) “Petróleo y nacionalismo en Argentina”, Hyspamérica


* Publicado en “Realidad Económica” No 246, ag-set de 2009.
** Investigadores del Departamento de Economía Política y Sistema Mundial del Centro Cultural de la Cooperación Floreal Gorini.

FUCHAD QUIERE QUE SE LLEVEN LA SAL


por “La Arena”*


La Fundación Chadileuvú (FUCHAD) no acepta que la explotación de Potasio Río Colorado deje los residuos de sal común en las proximidades del río. Su presidente, Héctor Gómez, señala además al diario pampeano que "...el potasio también es parte del patrimonio nacional", afirmando que el emprendimiento sólo beneficiará –y poco– a la provincia de Mendoza, y reclamando que la industrialización del mineral se realice en nuestro país.

La Fundación Chadileuvú (FUCHAD) no quiere que la extracción de potasio en el río Colorado deje una ´montaña´ de sal de por vida aunque sea a 18 kilómetros del río. El riesgo de contaminación siempre estará presente. Por ello, pedirá al gobierno pampeano y al comité cuenca que exijan que la parva de sal no quede allí. También solicitará que la industrialización del mineral se realice en nuestro país.

"El balance es levemente positivo para Mendoza, pero negativo para el país". Así evaluó la Fundación Chadileuvú los pro y los contra del proyecto minero Potasio Río Colorado, un megaemprendimiento que hace unos días obtuvo el visto bueno de la provincia de Mendoza para ponerse en marcha. Los perjuicios de la explotación superarán holgadamente a los pocos beneficios que aportará, que además sólo alcanzarán a la provincia de Mendoza. "El potasio también es parte del patrimonio nacional", sostuvo Héctor Gómez1, presidente de la Fundación, al señalar lo injusto del hecho de que esa reserva mineral se encuentre en una provincia, devengue beneficios sólo a ella.

En la otra vereda, los efectos negativos serán mayores, máxime si se meritúa la posibilidad de contaminación del río norpatagónico. A la Fuchad le preocupa sobremanera este último punto, porque si hubiera un derrame o algún incidente, no se sentirá en la provincia de Mendoza sino en las cuatro restantes: Neuquén, La Pampa, Río Negro y Buenos Aires.

Mendoza tiene una conocida actitud de manejar los ríos interprovinciales como si fueran propios, y de desinteresarse de los problemas ambientales que su actitud provoca. Por ello, para la entidad pampeana no representa ninguna garantía que el residuo salino (cloruro de sodio) de la extracción de potasio, se deposite en un bajo ubicado a 18 kilómetros del río. "Si bien es muchísimo mejor que lo anterior -el deshecho iba a quedar junto al cauce-, no nos convence que esas parvas van a quedar allí por años y años, para siempre", reflexionó Gómez. "Quién nos puede garantizar que el clima del futuro va a ser igual que el actual, o que no haya algún sismo de gran intensidad que produzca algún problema".

Para la Fundación Chadileuvú, la única y real solución contra la contaminación es "que se lleven el cloruro de sodio", que no quede depositado allí. "Se incrementarían los gastos, es cierto, porque habría que transportar el doble del volumen que tienen previsto ahora", reconoció Gómez. No obstante, el negocio seguiría siendo muy rentable. "No van a perder plata, sólo se les van a achicar un poco sus enormes márgenes de ganancias", disparó el directivo.


TRABAJO

Acompañado de Carlos Millán y Néstor Decristófano, Gómez anticipó que elevará la Fundación es que la industrialización del cloruro de potasio se realice en nuestro país, algo que ahora no está previsto. "Así se generaría una importante mano de obra", señalaron los directivos, aclarando que a su entender, los 380 puestos de trabajo que dará la mina son poco para el impacto ambiental que provocará y el volumen de riquezas que dará a sus inversores. Si la industrialización se concretara en el país, se crearían "miles de puestos de trabajo", aseguraron. "Queremos que todo el proceso se haga acá, en el país: la extracción, el procesado y el envío al exterior como fertilizante".

El proyecto, tal como está concebido y autorizado, es sacar el material en bruto, transportarlo hasta el puerto de Bahía Blanca en camiones y trenes, y sacarlo fuera del país en barcos. Es decir, la etapa de ponerle valor agregado se haría en el extranjero. "Ya es hora de dar vuelta la ecuación y empezar a exigir que la industrialización se haga acá", reiteró Gómez. Este pedido también se elevará al gobierno pampeano y al Comité Interjurisdiccional del Río Colorado (Coirco), para que ellos le den el curso que les parezca apropiado.


ESTRATÉGICO

Otras dos preocupaciones que embargan a los titulares de la Fuchad son la importancia del potasio -materia prima de los fertilizantes- y el ´desmersurado´ consumo de gas natural que tendrá la mina.

Los suelos argentinos hoy no requieren de una fertilización intensa porque están -salvo algunos sectores- en buenas condiciones. "Pero no sabemos qué va a pasar dentro de 30 años. Quizá lo necesitemos, y entonces nos vamos a dar cuenta del valor estratégico que tiene el potasio".
El consumo de gas será tan alto que en el momento de mayor actividad, la mina necesitará de 1 millón de metros cúbicos por día. Esto es nada menos que un tercio de lo que Argentina compra a Bolivia para garantizar el consumo de sus habitantes. "Semejante despilfarro es inconcebible en un país con una creciente crisis energética", advirtió la Fuchad.

Con esos elementos, la Fundación se manifestó en contra del proyecto minero, por lo menos en las condiciones en que está aprobado, y reclamó a los gobiernos de las provincias condóminas del río a que inicien acciones "para aventar en lo más posible estas fundadas prevenciones y dudas".

*Publicado por la Arena, La Pampa. Diciembre de 2009.

1. Héctor Gómez es miembro del MORELP (MORENO de La Pampa)

NOTICIAS

Inundaciones y cortes

En las últimas semanas las fuertes lluvias provocaron, entre otros percances, amplios cortes del suministro eléctrico en la Capital y el Gran Buenos Aires. La inundación de muchas zonas de la Capital es principalmente el resultado de la demora en concretar las obras de alivio –fundamentalmente en la cuenca del Maldonado- de parte de los gobiernos de la C.A.de Buenos Aires, actual y anteriores. Pero se volvió a demostrar la incuria de las empresas distribuidoras, en particular de Edesur: la falta de impermeabilización de las cámaras de distribución, la escasez de equipos de emergencia y, sobre todo, la precarización del personal, que ha provocado situaciones de conflicto con la empresa.

Cae la demanda eléctrica

La demanda neta total de energía fue en diciembre último de 9.023,6 gigavatios contra 9.053,4 de igual mes del 2008, un descenso del 1,3 % -la primera caída interanual de los últimos siete años- pero el pico diario de diciembre último fue 3,4% más alto que el de 2008. La baja fue mayor en Capital y el Gran Buenos Aires que en otras provincias del interior del país, aunque subió en las provincias de Formosa (36,6%!), San Juan, Salta , Corrientes y Mendoza. Por regiones el consumo registró un aumento interanual del 6,2 % en Cuyo, Noreste 4,9 %; Centro 4% y Litoral 1,5%.

Menos regalías para Neuquén

La ministra de Hacienda, Obras y Servicios Públicos de Neuquén señaló que la Provincia estima recibir menos fondos por regalías debido a una caída de la producción de hidrocarburos en enero, febrero y marzo. "Según nuestras estimaciones serán 47 millones de pesos menos en el trimestre", dijo la ministra. Además afirmó que la caída de la extracción no estaba prevista cuando realizaron el presupuesto provincial para 2010 "porque teníamos una situación distinta, pero ahora vamos monitoreando mes a mes y la tendencia es decreciente". En cuanto a la recaudación provincial, dijo: "Tuvimos una caída de recaudación de regalías por las cuestiones de producción pero apostamos a mejorar con la implementación de la nueva alícuota de Ingresos Brutos".

Deudas con generadoras

Cammesa, la empresa que opera el despacho eléctrico, tiene una deuda de $ 819,89 millones con las generadoras de electricidad, deuda que se viene acumulando desde enero de 2008, por la compensación que tendrían que percibir las empresas por la diferencia entre el costo de generación y el precio del mercado. Está vigente la Resolución 724/08 de la Secretaría de Energía, que establece priorizar los pagos del margen para las empresas que se comprometan a utilizar el dinero para reparación o repotenciación de equipos o compra de equipamiento nuevo, para aumentar la generación. De los planes de inversión presentados en 2009 por $ 2.754M, Cammesa pagó hasta ahora $ 585M. Entre las empresas que adhirieron a los beneficios de la Res 724/08 se encuentran las centrales Puerto, Costanera, Dock Sud, Piedrabuena, AES Paraná, Genelba, Loma de la Lata.

Biocombustibles

En 15 días, los surtidores de algunas estaciones de servicios porteñas comenzarán a expender naftas mezcladas con un porcentaje de etanol (5% como mínimo). Las petroleras están obligadas a ofrecer esos combustibles por la Ley 26.093 (de biocombustibles) que rige desde el 1º de enero. Aunque difícilmente se pueda cumplir con la ley: harían falta 300.000 tn de etanol durante 2010, pero la producción prevista es de aproximadamente 200 a 220 mil tn, porque no todos los ingenios azucareros -donde se obtiene la materia prima para fabricar el etanol,-están trabajando.

Los biocombustibles ya se venden en la región noroeste, donde se concentra la producción de la caña de azúcar, y las distintas petroleras están paulatinamente avanzando con el suministro a otras regiones. YPF será la primera en llegar a la Capital Federal y hacia mediados de año llegarían las otras marcas; la ley establece cupos para cada petrolera, según la participación de mercado que alcanzaron en 2009. Las empresas aseguran que el corte con etanol no afectará el precio de las naftas, aunque dependería del incremento en el precio del etanol fijado por la Secretaría de Energía; ahora es $ 2,546 el litro, pero viene aumentando mes a mes.